Tengo dos computadoras, dos teléfonos celulares, equipo de estéreo, mi moto, y una radio. Eso es todo la tecnología moderna que utilizo en mi día normal. Y ya es más que suficiente.
Soy algo de un "luddite(http://en.wikipedia.org/wiki/Luddite)," aunque solo en espíritu y no en práctica, porque no voy por el mundo destruyendo aparatos de tecnología, aunque a veces quiero decir a la gente que dejen de mandar mensajes de texto constantemente, o que hablen con las personas en su alrededor. Por eso me gusta estar en el ambiente de la educación: todavía es posible comunicarse cara a cara con otros estudiantes, los profesores y alumnos. De hecho, el uso de teléfonos celulares en las aulas de la mayoría de las universidades está sumamente prohibido, y eso significa que los estudiantes tienen que hacer algo que casi no pasa nunca ahora: escuchar a una persona en vivo y tener interacciones con otras personas sin que estén interrumpidos por una llamada entrante o un mensaje de texto.
No estoy diciendo que no me gusta la tecnología, solo que esta tiene su lugar, y no debe ser un bombardeo constante en nuestras vidas. Debe ser algo que nos hace más eficaz e útiles como personas, y no extensiones de algún aparato. Un ejemplo de eso me pasó esta semana durante mis clases. Tuve algunas presentaciones preparadas para enseñar el contenido de las lecturas en mis clases de español 101. Ocurrió dos veces que la tecnología en la aula no funcionaba por razones de error de usuario o por estar fuera de servicio. Ambas veces tuve una clase en que funcionaba, y otra un que no. En la clase en que no funcionaba mi presentación, se alargaba mi discurso tanto que no alcancé terminarlo. Usando la tecnología vieja de escribir el contenido en el pizarrón demoró por lo menos diez minutos más que presentarlo en formato powerpoint, o sea, que sin la tecnología más moderna, soy un veinte porciento menos eficiente que con ella.
En fin, quiero preservar una separación entre el ser humano y la tecnología, pero sin duda es necesario utilizarla en tantos aspectos de la vida que sin ella, perdemos mucho en tiempo y experiencia.